Definitivamente, el dinero, aunque no es lo más importante, es importante. Pero a veces, sin darnos cuenta, hacemos del dinero más importante de lo que realmente es, y pensamos que a través del dinero podemos alcanzar ciertas cosas que solo podemos obtener con Dios. A través de la historia bíblica y de la historia del mundo, hemos visto hombres y mujeres cometer este gravísimo error, y traer a sí grandes consecuencias, entre estas, una gran insatisfacción, a veces perpetua, permanente en el corazón de la persona porque busca y busca, hasta darse cuenta que solo Dios puede llenar ese vacío. Hay un vacío existencial que solo lo llena Dios. Solo Dios puede llenar el vacío del corazón de cada uno de nosotros.
7 cosas que Dios te puede dar, que nunca podrás tener a través del dinero:
El dinero no te va a ayudar a recuperar oportunidades perdidas.
“7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, por el hombre que hace maldades.” Salmos 37:7
Guarda silencio ante Jehová, y espera en Él. Solo Dios puede darte nuevas oportunidades que cambien tu vida y transformen tu maldición en bendición. Todos vamos a perder oportunidades, y pensamos que la manera de recompensarlas es con dinero, con finanzas, pero en realidad, lo único que podemos hacer es crear nuevas oportunidades y nuevos momentos y no desperdiciar los nuevos que van a llegar. Pero tienes que saber que, en realidad, lo que se perdió a nivel de oportunidades emocionales, espirituales, de relaciones, no lo puedes comprar con dinero porque, si piensas así, estarás involucrándote en cosas totalmente incorrectas.
Nunca podrás comprar con dinero tu paz. Es más, los ejemplos que vemos en la palabra de Dios son totalmente contrarios. Vemos personas con gran cantidad de dinero, y que nunca tuvieron paz. Un salmo clásico es el que dice: En paz me acostaré y así mismo dormiré porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado. El único que te da confianza, satisfacción y paz es Dios. Jesús habló a sus discípulos de un hombre que tenía mucha cosecha y decidió construir grandes graneros, y dijo: Ahora podré decir a mi alma que descanse y que esté tranquila. Pero el Señor le dijo: Si esa es tu confianza, esta noche se llevan tu alma. En otras palabras, buscó tener paz en sus graneros, pero perdió su alma. Solo Dios puede darte paz.
Amor sincero, verdadero. Lamentablemente, a través de los tiempos, la gente ha utilizado el dinero como sustituto del verdadero amor que solo podemos obtener a través de Dios. Cuando nuestras relaciones están basadas en lo que tenemos, vamos a recibir grandes frustraciones y tristeza cuando vemos la reacción de la gente en los momentos difíciles cuando no les podemos proveer lo que ellos aparentemente necesitan y que realmente buscaban de nosotros. Seguramente has sabido o has tenido gente alrededor que mientras estabas bien, con dinero, mientras tenías oportunidades, mientras podías ofrecerles algo, esas personas estaban ahí; pero en el momento que desapareció, también esas amistades se fueron con esos recursos que tenías.
“7 Las muchas aguas no podrán apagar el amor, ni lo ahogarán los ríos. Si diese el hombre todos los bienes de su casa por este amor, de cierto lo menospreciarían.” Cantares 8:7
Aquí se hace el balance perfecto entre lo que es el verdadero amor y las riquezas. Un hombre que encuentra el verdadero amor, está dispuesto a dejarlo todo porque ama de esa manera; no depende de las riquezas, de las finanzas, de los recursos. La realidad es que el verdadero amor solo se encuentra en Dios y en personas que llegan a valorarte mucho más allá de los recursos que tienes disponibles.
Vida. Tú no puedes comprar vida con dinero. Puedes extender la existencia física de una persona, pero vida más allá de lo que es la existencia, lo que decimos “esto es vida”, esa vida solo te la puede dar Dios. La existencia en ocasiones el dinero te la puede extender. Por eso la medicina; la gente busca con dinero extender la vida. Puedes mejorar tu existencia en esta tierra, hacer tu vida un poco más fácil; pero lo que es realmente vida, solo Dios te lo puede dar. Cristo dijo: Yo he venido para darte vida, y para dártela en abundancia. El joven rico le dijo al Maestro: Yo quiero la clase de vida que tú tienes, ¿qué tengo que hacer? Él sabía que había una vida más allá de todo lo que había alcanzado; es la misma vida de Dios, la vida zoé, y no hay dinero que pueda comprar esa clase de vida.
Salud. La verdadera salud es integral. Puedes emplear medicamentos o aparatos para mejorar tu calidad de vida, pero la salud realmente solo puede venir de Dios. Esa salud que es parte de la esencia de lo que es vida, solo Dios te la puede dar.
Perdón. El verdadero perdón no puede ser comprado con dinero. Aun el perdón para ti, solo con la sangre de Cristo se pudo pagar. Cuando trabajamos en relaciones saludables con otros, la única manera es cuando el perdón va más allá de cualquier recurso material. De otra manera, sería por interés, y no algo real y verdadero que le permita a la persona manifestar la libertad de Cristo Jesús en su corazón.
Unción, el poder de Dios. Lo interesante es que Jesús nos dice que, si somos buenos administradores de los talentos y los recursos que tenemos en nuestras manos, entonces, Dios nos puede confiar las riquezas más grandes: El poder, la unción de Dios. Tu manera de administrar correctamente tus recursos, tus finanzas, te da acceso a mayor unción, mayor poder; pero no es porque el dinero te dé ese acceso, sino que tu actitud de correcta administración le muestra a Dios tu capacidad de que Él te entregue algo más grande, que es su poder, porque vas a poder administrarlo correctamente.
Estas siete cosas solo Dios te las puede dar.
DIOS ES NUESTRO PROVEDOR !!
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